Gente insegura: Cuando las relaciones fallan por intenso.
Muchas veces al terminar
una relación es inevitable preguntarnos ¿qué salió mal? Todo empezó de
maravilla y las cosas iban bien, estabas enamoradísimo, vamos… ¡desbordabas
locura por tu pareja! Entonces, ¿Dónde estuvo el error? En varias ocasiones me
encontré a mí mismo en esa situación, y después de analizarlo demasiado y hacer
un recorrido por algunas de las relaciones en las que en su momento no supe
claramente la razón del colapso, he llegado por fin a una conclusión: Desbordar
locura por tu pareja no es malo, lo malo es cuando esa inocente locura empieza
a alimentarse de la inseguridad.
¿A qué me refiero? Tengo que
aceptar que mi personalidad es de esas a las que les llaman “intensa”, y aunque
muchas veces podemos pensar que es algo bueno, en cuestión de las relaciones a
veces nos juega en contra. Yo era ese tipo de novio empalagoso que
prácticamente no dejaba respirar a su pareja, ese que llamaba apenas se
despertaba y antes de dormir, que durante todo el día preguntaba en dónde
estaba y qué estaba haciendo, que se ponía celoso del tiempo que pasaba
haciendo “quién sabe qué” en su teléfono, que exigía demasiada atención y
tiempo y, además (tengo que aceptarlo), trataba de manipular emocionalmente a
mi pareja para conseguir que siguiera conmigo. ¿No suena deprimente?
Ahora que lo pienso en
verdad me pregunto: ¿Cómo es que no me mandaban a la mierda desde mucho antes?
No se trataba de falta de amor sino todo lo contrario, había exceso del mismo.
Y en algunas de las ocasiones (como en la mía) esa revolución de sentimientos y
ese gran e inexplicable amor hacia tu pareja se va haciendo mayor por una razón
que no aceptamos tan fácilmente: que ese amor no lo sientes por ti. Y es ahí
cuando todas esas inseguridades que venimos cargando de relaciones anteriores,
de ligues, de amigos y hasta de familia se hacen presentes y empiezan a mover
las piezas de tu relación.
Claro, todo iba bien, quizá
hasta sorpresivamente mucho mejor de lo que imaginaste al grado de pensar: ¿Qué
hice para merecer a alguien así? ¿Qué es lo que ve en mí? ¿Por qué quiere estar
conmigo cuando podría tener a alguien mejor? Si te suena alguna de estas
preguntas… ¡Ya valiste! Porque sin lugar a dudas la inseguridad empieza a hacer
efecto.
Vale, te convence de que
eres con quien quiere estar y de que no tiene ojos más que para ti. Entras en
una zona de confort padrísima y todo vuelve a ser miel sobre hojuelas… Hasta
que vuelve la burra al trigo y es que si tú eres la única persona en su vida,
¿por qué no demostrarlo más? ¡Ándale! Que aquí empiezan las exigencias.
Exigimos tiempo, y no sólo cantidad sino también calidad, exigimos detalles,
llamadas, mensajes a toda hora y que contesten los que les mandamos casi
instantáneamente, sino nuestra mente empieza a pensar que nos están ignorando,
que están con alguien más o que de seguro se está aburriendo de ti y por eso no
te contesta. ¡Intenso!
Pero, ¿qué tiene de malo?
Únicamente estás pidiendo que te demuestre más su interés, ¿no? No, lo que
estás haciendo es hartar poco a poco a tu pareja sin darte cuenta. Esos
“pequeños” actos de cariño de tu parte no son más que tus inseguridades
llevando las riendas de tu noviazgo. ¿Qué pasa después en la historia? Que
conociste a Nacho García, el mejor amigo (o Susana Godínez, según sea el caso),
y no es que te caiga mal, quizá aún ni lo conoces del todo y sabes que se
llevan excelente. Pero después de un tiempo esa Susanita no te parece tan
inocente del todo, y si además está guapa, ¡agárrate! Empiezas a verla como
amenaza muchas veces llegando a pedirle que ya no salga tanto con ella o que de
plano ya no le hable. MEGA FAIL.
Empezar a poner
prohibiciones de ese tipo en una relación no está padre. Por más de que en tu
mente te digas a ti mismo que es únicamente por el bien de ambos, por más que
aceptes que también a ti te prohíba hablarle a Nachito, por más que trates de
asegurarte a ti mismo de que no tiene nada de malo y es normal en un noviazgo.
Nuevamente son tus inseguridades tejiendo la tela en la que tarde o temprano te
vas a terminar enredando.
“Si quedamos de vernos a
las 8, ¿por qué llegas hasta las 9?”, ¿Te suena? ¿Te molesta la impuntualidad o
lo que realmente te molesta es no saber qué hizo en esa hora extra o pensar que
otra cosa fue más importante que tú? No, si andar con alguien intenso es una cosa
de verdad cabrona. Todo se ve desde mil perspectivas, le encontramos peros y
pedimos explicaciones a veces SIN MOTIVO ALGUNO, más que porque podemos por el
simple hecho de ser la pareja. Espérate… que es importante saber que ser el
novio o la novia no te hace amo ni dueño, y más importante aún es que no te da
derechos sobre la otra persona. Uno de los errores más comunes que identifiqué
en mis relaciones fallidas era el creer que tenía derechos sobre mi pareja, sin
entender que además de una vida juntos también se tiene una vida personal, que
no todo se hace en grupo y que ambos tenemos una familia y amigos que ya
estaban desde antes.
Ah, pero se nos hace bien
fácil querer juntarlo todo. Salir todo el tiempo juntos, revolver sus amigos
con los tuyos y olvidarte por completo de que toda persona, por más enamorada
que esté, también necesita tiempo fuera. Para sí mismo, para los demás, para lo
que sea menos estar con su pareja, para poder extrañarse y tener algo nuevo de
qué hablar, para respirar. Pero los intensos no vemos eso, y siendo inseguros
es peor. Porque si no quiere estar todo el tiempo conmigo entonces no me quiere
tanto como dice, porque si quiere salir un fin de semana sólo con sus amistades
entonces ya no le gusta pasar tiempo conmigo, porque si no me invitó a la
fiesta de su trabajo entonces no le importo tanto, porque si fue a visitar a su
hermana que vive cerca de tu casa y no pasó a verte es porque de seguro ya le
hartaste.
Ufff, no tienen idea de la
cantidad de momentos así que se me vienen a la mente. Recuerdo varias ocasiones
en que ese tipo de pensamientos rondaban mi cabeza y me hacían sufrir poco a
poco sin razón. Sin darme cuenta de que no se trataba de que no me quisiera o
de que no le importara, sino que se trataba de mí. Todo el tiempo se trataba de
mí, de lo que yo quería, de lo que yo sentía, de lo que yo pensaba, de mis
inseguridades actuando de forma errónea pensando que si le llamaba todo el
tiempo le estaba demostrando cariño, que si tenía celos era porque amaba
demasiado, que si me metía de lleno en su vida entonces jamás me dejaría.
De lo que los inseguros e
intensos no nos damos cuenta, es de que no es el amor el que nos hace actuar de
esa manera sino la falta de, la falta de seguridad con nosotros mismos, con lo
que somos, con nuestro cuerpo, nuestra cara, nuestras cualidades y hasta los
defectos. Lo que no vemos es que a veces no soportamos la idea de estar con uno
mismo y por eso queremos llenar ese tiempo con el del otro, y más importante es
que no vemos que en lugar de hacer que esa persona se enamore más, estamos
logrando completamente lo contrario.
A mí me tomó dos años de
soltería y un año sin salir absolutamente con nadie analizar mis errores,
reconocer mis defectos y superar inseguridades. Un año estando solo, conociéndome,
definiendo lo que soy y lo que quiero, cerrando ciclos y abriendo nuevas
puertas, viendo cuántas oportunidades se me fueron de las manos, cuántas
personas que pudieron haber durado más en mi vida se alejaron por la misma
razón, cuántas veces sufrí por gusto y le eché la culpa al otro. Puede que un
año sea poco, puede que sea mucho, pero sé que fue el suficiente para empezar
de cero. ¿Y tú cuánto tiempo más vas a permitirte arruinar relaciones dejando
que sean tus inseguridades las que actúen por ti?
Wow excelente me pasa lo mismo
ReplyDeleteExcelente !!! :) fuerte abrazo amigo. Octavio
ReplyDeletecaray! pensé que hablabas de mi. jaja me sonó.
ReplyDeleteLo he visto tantas veces...
ReplyDeleteDe verdad muy bueno.. el día de ayer descubrí este blog y ahora en cada momento que tengo libre estoy leyendo todas tus publicaciones. Edd:)
ReplyDeleteTengo este problema en mi vida en este momento, mi relacion va en declive por mi inseguridad, ya no puedo estar un momento feliz sin estar dudando de mi mismo, echandole la culpa a mi pareja.
ReplyDeleteQUisiera de un momento a otro poder dejar de pensar asi dr mi mismo, intento ser seguro de mi mismo pero de un momento a otro viene la inseguridad a mi, como un valde de agua fria, cae sobre mi, no importando que hoy fuera un exelente dia, sale siempre a relucir mi inseguridad y acaba en una discucion con mi parejq, la verdad es un infierno lo que estoy viviendo, no puedo mas.
Busco ayuda, pienso que lo mejor es retirarme de la vida de mi pareje y no hacer daño (mas del que ya hice)
Si alguien sabe que puedo hacer, porfavor ayudenme.
Tengo una pareja y a larga distancia , y me siento exactamente como lo describes , que puedo aser para no ser tan inseguro algunos tips ?
ReplyDeleteGracias por escuchar
This comment has been removed by the author.
ReplyDelete